RETO MARATHON DE BERLIN 2008

Bueno pues llegó de nuevo el momento. Quedan solo unos días para que otra vez nos marchemos toda la family a Berlin a ver correr a Papá !!

No estoy nervioso, ni tampoco preocupado. Se que el entreno ya lo tengo en las piernas y que estoy preparado para correr de nuevo un Marathon. La marca personal que haga depende de tantos factores que es dificil preveerla con seguridad. Mi mejor tiempo hasta ahora es de 3H 35' 30''. Me conformo con rebajar de nuevo este tiempo y por tanto hacer récord personal. Pero se que no es fácil. El éxito en una carrera tan larga depende de muchos factores que algunas veces no puedes controlar del todo. Hará buen tiempo ? beberé lo suficiente ? llevaré un buen ritmo ? responderán bien las piernas ? ...

He cuidado mucho mi dieta estos tres largos meses, me he alimentado casi exclusivamente para esta carrera, he salido a entrenar una media de cuatro días a la semana y he recorrido unos 800 km en pleno verano, con temperaturas de más de 35 grados y con mucha humedad, muchas veces de día y también muchas veces de noche. Soy más resistente que hace un año y me conozco mejor... ¿¿ Será suficiente para superar el muro que aparece en el km treinta y tantos cuando ya lleve corriendo más de dos horas y media seguidas y aparezca el cansancio y la agonía ?? ¿¿ podré seguir avanzando cuando todo mi organismo me pida me que pare ?? ¿¿ vencerá mi cabeza o será más fuerte mi corazón ?? sinceramente no lo se y es justamente en esa incertidumbre donde reside toda la mistica de correr un marathon. Es como entrar en un terreno personal desconocido llevado solamente por las sensaciones. Es como romper por unos instantes todo tu circulo de seguridad y esperar a ver que ocurre ... y enfrentarte a ello. " No importa lo que pase, no importa lo que veas, sobre todo sigue adelante..." dijo el héroe griego Ulises a sus marinos al escuchar el engañoso canto de las sirenas en el poema de La Odisea y eso mismo es lo que yo deberé hacer.

Por unas horas todo la tierra girara bajo mis pies y yo estaré corriendo en lo más alto. Solo yo, con mis zancadas y mi respiración, casi sin oir a las miles de personas animando, casi sin ver más alla de la línea azul que marca obsesivamente el camino, casi sin sentir el dolor, pero extrañamente vivo y despierto.

El domingo saldré a correr para intentar ser marathoniano por cuarta vez.

A por ello Joe !!!!